Es casi una década desde que pude adquirir mis primeras prendas Patagonia. En aquel entonces, me acuerdo que mi gran amigo y compañero de cordada tenía una chaqueta en muy mal estado, la llevo a una tienda Patagonia y se la cambiaron por una nueva, quede asombrado! Sin pensarlo mucho más y en preparación para mi primer viaje al Chaltén - Patagonia, entré a la página web y me gasté una gran parte de mi sueldo, sabía que tener la indumentaria adecuado para escaldas de gran envergadura sería primordial. Sin duda fue una temporada excepcional, tuvimos la oportunidad de escalar el Cerro Torre y el Fitz Roy entre otras agujas de los mismos macizos, simplemente alucinante. Desde aquel entonces este grupo de prendas y sobre todo la chaqueta de plumas ligera y la primera cama R1 me han acompañado por Asia, África, Europa, Norte America y Sur America en búsqueda de grandes paredes y aventuras memorables. Cabe recalcar que el kilometraje y los años no pasan en vano, con un poco de cariño, motivación y el material necesario puedes darle una y otra vida más a tus prendas, así lo he hecho yo con los parches adhesivos de nylon durante años. Además, hoy en día tenemos la suerte de tener una tienda Patagonia en Ecuador donde quizás no te den prendas nuevas como hace 10 años, pero si te ayudan a reparar las tuyas, lo cual me parece aún mejor! De esta manera no solo manifiestan su compromiso con el medio ambiente, si no también enseñan a la sociedad a reutilizar prendas que aún les queda mucho por vivir.